¿Has encontrado por fin tu casa ideal y te mudas a tu nuevo hogar? ¿Quizás por temas laborales debes trasladarte a una nueva ciudad y contigo viajarán también todas tus pertenencias incluidos los muebles?
El denominador común de todas las mudanzas, independientemente de lo que las motiva, es el estrés. Estudios elaborados por psicólogos determinan que una mudanza es una de las actividades que mayor nivel de ansiedad genera. Como en Te lo guardo! nos preocupamos por tu tranquilidad, a continuación te detallamos una serie de ideas para que esta experiencia sea lo más agradable posible.
- En primer lugar, debes decidir, fundamentalmente en función de tu presupuesto, qué tipo de mudanza quieres: Desde la más profesional, en la que los operarios contratados protegen, embalan y desembalan tanto objetos como ropa o muebles, hasta la más casera, en la que tú te involucras en cada uno de los pasos a seguir. Si quieres una mudanza en la que te lo hagan todo, deberás estar preparado para gastar bastante más que si todo te lo organizas y transportas tú. Puedes ver el coste aproximado de una mudanza en Zaragoza en este post de hace unas semanas: Cuánto cuesta una mudanza en Zaragoza
- Deshacernos de lo que ya no utilizamos: Es un buen momento para tirar esos trastos y cachivaches que ya no usamos pero que guardamos “por si acaso”. Aprovecha y a través de aplicaciones como Wallapop o Vibbo, sácate un dinerillo extra que te vendrá muy bien para compensar el desembolso que supone mudarse. Igualmente, si en tu armario tienes ropa sin utilizar desde hace más de un año, véndela o dónala. Lo mismo con la ropa de tus hijos que ya se ha quedado pequeña o con los juguetes que dejaron hace tiempo olvidados.
- Empaquetar: Una vez que tenemos claro lo que nos vamos a llevar, es momento de introducirlo en cajas utilizando papel burbuja para proteger los objetos. No conviene que las cajas sean muy grandes porque sino serán muy pesadas y será complicado manejarlas. Mejor cajas más bien pequeñas pero de buena calidad, resistentes al peso. No metas las cosas sin ton ni son, mezclando vajilla con juguetes, por ejemplo. Introduce objetos de la misma familia en la misma caja, así será mucho más rápido colocarlos en tu nueva casa. Etiqueta cada caja en el lateral (para que se vea en caso de tenerlas apiladas) indicando la habitación a la que debería asignarse (cocina, baño, salón…). Igualmente, deberás elaborar una lista que guardarás aparte, con los objetos introducidos en cada caja, a la que asignarás un número que escribirás al lado de la etiqueta. De esta forma, sabrás qué contiene cada caja según su número. Otra idea útil es reservar una caja de emergencia: Mete lo necesario para pasar la primera noche en tu hogar, por si el primer día no has tenido tiempo de abrir todo.
- Transportar: Hay distintas posibilidades, puedes utilizar tu propio vehículo o alquilar una furgoneta o camión o contratar a una empresa especializada. En el caso de tener que trasladar muebles grandes y pesados, te aconsejamos la última opción.
- Mascotas: Si tienes mascotas, quizá no sea la mejor idea que ese día lo tengas contigo. Contrata por un día una guardería o un cuidador a través de las aplicaciones Gudog o Dogbuddy. Seguro que lo agradecerás.
Una vez en tu nuevo hogar, tómatelo con calma. Poco a poco ve desembalando y colocando ordenadamente tus pertenencias. Eso sí, no dejes ninguna caja por abrir ni coloques a lo loco… probablemente quedará así a perpetuidad!